Diabetes Mellitus Tipo II
¿Qué ocurre cuando se tiene ésta enfermedad?
Una persona con diabetes tipo II no produce suficiente insulina o las células no hacen uso de ella. El organismo requiere de la insulina para poder usar la glucosa como fuente de energía. Los almidones y azúcares provenientes de la alimentación se convierten en glucosa, que es el combustible básico para las células del cuerpo. La insulina lleva la glucosa a las células, cuando la glucosa se acumula en la sangre en vez de ingresar a las células, puede producir complicaciones de diabetes.
El estilo de vida, la obesidad y el sedentarismo puede influir en el surgimiento de la diabetes tipo II.
Síntomas:
- Constante necesidad de orinar.
- Sed inusual.
- Hambre extrema.
- Pérdida inusual de peso.
- Fatiga e irritabilidad extrema.
- Infecciones frecuentes.
- Visión borrosa.
- Cortes/moretones que tardan en sanar.
- Hormigueo o entumecimiento en las manos o los pies.
- Infecciones recurrentes de la piel, encías o vejiga.
¿Cómo se diagnostica la diabetes?
- Hemoglobina glucosilada (HbA1c):
La prueba HbA1c mide su nivel promedio de glucosa en la sangre durante los últimos 2 o 3 meses. Se diagnostica diabetes cuando: HbA1c ≥ 6,5%.
- Glucosa plasmática en ayunas:
Éste tipo de examen se realiza por lo general a primera hora de la mañana, y mide el nivel de glucosa en la sangre cuando se está en ayunas (8 horas sin ingerir alimentos a excepción de agua). Se diagnostica diabetes cuando: la glucosa plasmática en ayunas ≥ 126 mg/dL.
Complicaciones
Enfermedad Renal (nefropatía)
Los riñones están llenos de millones de diminutos vasos sanguíneos que actúan como filtros. Tienen como función eliminar productos de desecho de la sangre. La diabetes puede dañar los riñones y hacer que fallen. Cuando los riñones fallan, pierden su capacidad de filtrar los productos de desecho, lo que resulta en nefropatía.
Enfermedad cardíaca y derrame cerebral
Las personas con diabetes tienen mayor riesgo de tener un infarto o un derrame cerebral. Dos de cada tres personas con diabetes muere por problemas relacionados con enfermedades cardiovasculares.
Mala circulación
La diabetes hace que los vasos sanguíneos del pie y la pierna se vuelvan más angostos y duros. El fumado empeora aún más esta afección, ya que hace que las arterias se endurezcan más rápido. La mala circulación puede hacer que disminuya la capacidad del pie de combatir infecciones y por tanto que sane. La actividad física es buena para mejorar la circulación ya que estimula el flujo sanguíneo en los pies y piernas.
Enfermedad cardíaca y derrame cerebral
Las personas con diabetes tienen mayor riesgo de tener un infarto o un derrame cerebral. Dos de cada tres personas con diabetes muere por problemas relacionados con enfermedades cardiovasculares.